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el hecho de que, el proceso de, en base a, en cualquier caso, en función de, entonces, es evidente, evidentemente, mucho, para empezar, personalmente, pienso que, quiero decir que, etc .
También en la puntuación podemos ser insistentes en exceso en deter- minados signos: incisos con paréntesis o guiones, los dos puntos, el punto y coma, las notas, los asteriscos...
3.2 Vocablos cortos
Hay que preferir las palabras cortas a las largas y las sencillas a las com- plicadas . Un léxico claro ayuda a hacer más comprensible el texto . Las palabras más frecuentes suelen ser las más cortas . Ejemplos de dobletes de los que conviene elegir el primero, salvo por razones contextuales que fundamenten lo contrario:
· aproximado mejor que aproximativo;
· concretar mejor que concretizar;
· dar mejor que entregar;
· dar ejemplo mejor que ejemplificar;
· distinguir mejor que diferenciar,
· incluso mejor que inclusive;
· influir mejor que influenciar;
· merma mejor que disminución;
· terminar mejor que finalizar;
· uso mejor que utilización .
Un tipo de palabras muy largas son los adverbios terminados en -mente . Recargan la redacción y producen cacofonías . Se ha de evitar la costum- bre irreflexiva de iniciar un texto con un adverbio de este tipo, excepto cuando su función sea la de marcador textual . Ejemplo en un inicio de párrafo: «Posiblemente es la frase que mejor define la visión presente y la voluntad de futuro» quedaría mejor cambiando el orden del adverbio: «Es
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