Barcelona, Herder, 2015, 120 p.
Colección “Pensamiento”, dirigida por Manuel Cruz
ISBN: 978-84-254-3454-9
Diseño de la cubierta: Purpleprint Creative
Imagen de portada: Antarctica, Andreas Kambanis

En este ensayo editado por Herder, tras alertar sobre la barbarie neoliberal y la consiguiente “crisis del pensamiento occidental”, me planteo una doble pregunta: por un lado, cómo pensar la sociedad global, y, sobre todo, cómo lograr que la Tierra siga siendo un hogar habitable para todos los seres humanos y para los demás seres vivientes; por otro lado, cómo pensar en la sociedad global, cómo los grandes cambios históricos de este mundo globalizado están afectando e interpelando a la propia actividad de pensar, y, más concretamente, al modo en que debe ser entendida y practicada la filosofía.

Para analizar esta relación de ida y vuelta entre la globalización y la filosofía, he tomado como hilo conductor el concepto de tierra de nadie, que ha tenido significados y usos muy diversos desde el antiguo derecho romano hasta el presente siglo XXI: la terra nullius como tierra sin dueño, los territorios arrebatados por las grandes potencias europeas a los pueblos no europeos, la tierra disputada por dos Estados vecinos, la frontera amurallada por un Estado para impedir el libre tránsito de personas, y, por último, el “patrimonio común de la humanidad”. Mi propuesta es que nuestro planeta debe ser pensado y reconocido como Tierra de nadie, precisamente para que pueda ser preservado y habitado como patrimonio de todos.

En cuanto a la filosofía como oficio de pensar, considero que debe ser entendida como una actividad cosmopoliética, pues su tarea consiste en pensar las diferencias y las articulaciones entre las tres grandes esferas de la experiencia humana: el mundo (kosmos), el nosotros (polis) y el yo (ethos). En este sentido, tras revisar críticamente la historia del pensamiento occidental y cuestionar la tradición epistemocéntrica que ha prevalecido desde Platón hasta Hegel, propongo que la filosofía también sea entendida como tierra de nadie, porque su tarea consiste en conectar entre sí los territorios de la ciencia, la política y la ética, y porque todos los seres humanos, sea cual sea nuestro origen y condición, tenemos el derecho de acceder a ella y ejercitarla libremente.

I. La crisis del pensamiento occidental, p. 11

II. Cómo pensar la sociedad global, p. 23

1. El concepto de terra nullius en la Roma antigua, p. 27
2. La terra nullius y la expansión de la Europa moderna, p. 35
3. La globalización amurallada y los nadie sin tierra, p. 52
4. Hacia un cosmopolitismo ecológico: la Tierra de nadie, p. 63

III. Cómo pensar en la sociedad global, p. 85

1. Las tres (o cuatro) condiciones básicas de la vida humana, p. 89
2. La filosofía como cosmopoliética y como tierra de nadie, p. 91
3. El epistemocentrismo como tradición dominante de la filosofía occidental, p. 94
4. La crisis del epistemocentrismo y la fragmentación del pensamiento filosófico, p. 102
5. La renovación de la filosofía ante los retos del siglo XXI, p. 110

Nota final, p. 119.

Antonio Fernández Vicente firma una breve reseña en la edición española de Le Monde Diplomatique, nº 245, marzo 2016, p. 30.

Miloš Ćipranić firma una reseña en la revista Philosophy and Society (vol. XXVII, nº 4, 2016, pp. 977-978), editada por el Instituto de Filosofía y Teoría Social de la Universidad de Belgrado (Serbia).

Agustina Varela Manograsso firma una reseña en Revista de Hispanismo Filosófico. Historia del Pensamiento Iberoamericano, 22 (2017), pp. 269-271.

Carlos Rivas Mangas firma una reseña en Bajo palabra. Revista de filosofía, Epoca 2, Nº 17, 2017, pp. 745-748.

«¿Qué preferimos, el final del capitalismo o el de la humanidad?», entrevista de Antonio Arco a Antonio Campillo, en La Verdad de Murcia, 20 de diciembre de 2016.

Última actualización: tierra_de_nadie._como_pensar_en_la_sociedad_global 10/06/2019 12:16

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