Esteroides, cuerpos cetónicos y prostaglandinas

Esteroides

 

Los esteroides son derivados del cilopentano - perhidrofenantreno. Esta molécula origina moléculas tales como colesterol, estradiol, progesterona, testosterona, aldosterona o corticosterona. Todas ellas son esenciales para el funcionamiento de nuestro metabolismo.

 

Cuerpos cetónicos

 

La hidrólisis de los triglicéridos en el tejido adiposo da lugar a la libe­ración de ácidos grasos libres hacia la sangre. Los ácidos grasos libres pueden utilizarse como una fuente inmediata de energía por muchos órganos; también pueden convertirse por el hígado en los derivados denominados cuerpos cetónicos. Estos cuerpos cetónicos son las moléculas ácidas de cuatro carbonos (ácido acetoacético y ácido (3-hidroxibutírico) y la acetona (el disolvente utilizado para eliminar el barniz de las uñas). Una degradación rápida de las grasas, como ocurre con las dietas estrictas con pocos hidratos de carbono y en la diabetes mellitus descontrolada, da lugar a una elevación de la concentración de cuerpos cetónicos en la sangre. Éste es un proceso que se denomina cetosis. Cuando en la sangre existe una cantidad suficiente de cuerpos cetónicos como para disminuir el pH sanguíneo, el proceso se denomina cetoacidosis. La cetoacidosis grave, que puede ocurrir en el contexto de la diabetes mellitus, puede dar lugar a coma y a la muerte.

 

Prostaglandinas

 

Las prostaglandinas son lípidos formados a partir de un ácido graso, llamado ácido araquidónico. Su nombre proviene de la próstata, pues fue en el primer lugar de donde se aisló una prostaglandina. Sin embargo, se han encontrado prostaglandinas en gran cantidad de tejidos.

Cumplen diversas funciones relacionadas generalmente con procesos inflamatorios, con dolor, fiebre, edemas y enrojecimiento.

  • Su producción se inhibe con la presencia de ácido acetil salicílico.

  • Algunas funcionan como vasodilatadores, regulando la presión sanguínea.

  • Promueven la contracción de la musculatura lisa.

  • Intervienen en la coagulación sanguínea.

  El ácido acetil salicílico inhibe la producción de prostaglandinas

 

Juan Manuel Moreno Ayuso. Departamento de Fisiología Humana -Medicina-, Espinardo (Murcia).